ACEPTA CELAYA...HAY QUE VER LOS DETALLES

Zelaya acepta crear gobierno de reconciliación en Honduras

La jornada
México


Tras la reunión en Costa Rica de los representantes del gobierno de facto y los propios, el presidente depuesto, Manuel Zelaya, manifestó su acuerdo con la propuesta del premio Nobel Oscar Arias para superar la crisis.

Reuters Publicado: 18/07/2009 16:11

Tegucigalpa.

El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, manifestó este sábado su acuerdo con la propuesta de formar un Gobierno de unidad para solucionar la crisis política desatada por un golpe de Estado en la nación centroamericana.
La creación de un Gobierno de reconciliación fue propuesta por el presidente costarricense Oscar Arias, mediador en las negociaciones que mantienen el sábado en San José delegaciones de Zelaya y del Gobierno interino que lo reemplazó.
"Estamos de acuerdo, siempre y cuando la integración sea en todos los poderes del Estado", dijo Zelaya a Radio Globo, una de las pocas emisoras hondureñas no favorables al Gobierno de facto.
No obstante, un portavoz de Micheletti dijo a Reuters en Tegucigalpa que la propuesta del retorno de Zelaya al poder era inaceptable.
El presidente del Congreso, Roberto Micheletti, asumió la presidencia tras el golpe militar que sacó a Zelaya del poder a punta de pistola la madrugada del 28 de junio y tras el que fue llevado en avión a Costa Rica esa misma noche.
La posición de Zelaya de aceptar la propuesta de un gobierno de unidad es una de sus primeras señales de flexibilidad tres semanas después del golpe.
El mandatario despuesto dijo además que regresaría a Honduras en los próximos días, desafiando una orden de captura que pende sobre su cabeza por, supuestamente, haber intentado violar la Constitución, entre otras acusaciones.
"A partir de mañana, el lunes, los días subsiguientes nosotros estamos regresando a Honduras", dijo sin dar más detalles de cómo regresaría a su país.
Además del gobierno de unidad, Arias propuso a las delegaciones en San José la restitución de Zelaya para que cumpla lo que resta de su mandato hasta finales de enero del próximo año, declarar una amnistía para delitos políticos, y que líder derrocado desista de realizar un referendo que abriría la puerta a la reelección presidencial.
También puso en la mesa el traspaso del mando de las Fuerzas Armadas al tribunal electoral, y la integración de una comisión verificadora formada por organismos internacionales y hondureños destacados.